LA POLÍTICA PUEDE SER PELIGROSA A CUALQUIER VELOCIDAD.

por Enrique Fernández M.

Después de algunos decenios de persistente ataque neoliberal, la Política, la actividad política ha demostrado su enorme capacidad de resistencia. La primaria de la Concertación ha sido antes que nada y que todo, el triunfo de la política entendida como categoría social antinómica a los postulados neoliberales individualistas y aislacionistas.

Ricardo Lagos, triunfador de estos comicios, representa mejor que nadie este "reverdecer de laureles" de la política. La gente, las personas han comenzado a volver a creer, se han abierto a sentir una ilusión, han dejado aflorar sentimientos que la lógica libremercadista neoliberal niega y abomina. No sólo de consumir vive el ser humano, mayoritariamente la ciudadanía se niega a aceptar el precepto de que la suma de los egoísmos individuales pueden devenir en un bienestar colectivo, como lo afirman los neoliberales. Lagos es el líder carismático que ha hecho que se revitalicen, algunos dirán, se "reencanten" con la política.

Se vuelve a percibir que muchos de los problemas cotidianos que nos abruman, pese a la majadera insistencia en desvincularlos de componentes políticos, tienen una conexión objetiva con aquellas artificiales mayorías senatoriales que impiden la implementación de leyes que solucionarían los problemas de la gente.

La Política o la práctica política vuelve a tener centralidad. Pese a ser sistemáticamente tan vilipendiada y denostada, millones de ciudadanos están dispuestos a volver a creer. Los políticos, pese a todos los exterminadores, aún respiran y no son tan execrables. Los partidos políticos redefinen sus estrategias, reafirman la necesidad de evitar las repartijas de cargos y favores como eje rector de su quehacer. Se habla de dar paso a nuevas generaciones, ventilando las tensiones, eliminando los acuerdos cupulares, democratizando sus decisiones. De procesos electorales intrapartidarios surge la nominación del candidato único concertacionista y la elección del presidente de Renovación Nacional.

Es esta recuperación vigorosa, esta "rentrée" en escena de la política la que ha puesto nerviosos a muchos, acostumbrados a las decisiones acordadas y transadas entre unos pocos en los pasillos del Poder. Las señales quizás comenzaron el mismísimo 30 de Mayo. El propio ministro del Interior calificó de "sospechoso" al inesperado corte de energía eléctrica acaecido ese dia. Dos lustros de democracia tutelada nos ha permitido desarrollar un sexto sentido para interpretar, descifrar o percibir lo que se pretende decir actuando de un modo o de otro. No debemos olvidar que somos un país que se habituado al lenguaje gestual, tanto pidiendo gestos como aprendiendo a "leer" lo que algunos de estos pueden querer decir.

No habiendo transcurrido una semana desde el 30 de mayo, la preocupación del país no debía re-centrarse en cuestiones económicas, la crisis, recesión, la delicuencia, la contaminación, etc. Había una preocupación mayor, superior para el interés ciudadano según gran parte de la prensa que en nuestro país controlan casi sin contrapeso, los sectores empresariales y políticos que adhieren al ideario neoliberal. Esto es, que la práctica política consustancial a la democracia y el fundamentalismo libremercadista, no son conceptos complementarios.

Por tanto era necesario, pese a que por ejemplo, las cifras de cesantía entregadas son social y humanamente cada dia más acuciantes, centrar la agenda informativa en el "escándalo" de los parlamentarios que conducían a exceso de velocidad o con licencias de conducir cuyos controles estaban vencidos. La categoría de "escándalo", determinada por los mismos que la vehiculan, podría haber sido establecida en torno a cualquier otro tema. Lo importante era torpedear, aguar la fiesta, mostrar que no todo lo que brilla es oro, a no olvidar por último, lo dañina que es la política y los políticos."Difícilmente se podrá dudar, que muy generalmente la política ha pasado a ser demasiado importante, demasiado costosa y nociva, absorbiendo demasiada energía mental y recursos materiales, y que al mismo tiempo está perdiendo más y más respeto y apoyo simpatizante del público que ha llegado a considerarla, en forma creciente, como un mal necesario pero incurable, que debe ser soportado"

Programas radiales matutinos, primeras planas en toda la prensa escrita, reporteros de una casta estación televisiva desplazados al sitio de los sucesos para verificar en vivo, cuan viles, arrogantes y prepotentes pueden ser los señores políticos, en este caso coincidentemente, diputados de la Concertación, la misma coalición exitosa en la organización de una primaria, acto esencialmente político. Incluso debió "agarrar vihuela en esta cueca" el presidente de la Cámara de Diputados, Sr. Montes, para establecer que no corresponde hablar de farándula en relación al desempeño y comportamiento de los honorables.

Además y como siempre sucede en nuestra sociedad, de inmediato muchos rasgaron vestiduras del modo como habitualmente lo hacen cuando se plantean temas como el divorcio, la censura, el erotismo y la pornografía, etc., donde impajaritablemente, los "malos" son los denunciados y los "buenos" los denunciantes.

Deberemos acostumbrarnos en el curso de los próximos 6 meses, en la medida en que la actividad política de revitalice y adquiera preponderancia cotidiana, a ver estallar nuevos "escándalos" mediáticos que buscarán por encima de todo, minar el despertar del ciudadano que aguarda invernando dentro del consumidor socialmente estéril en que el neoliberalismo nos ha tratado de transformar.

Junio 1999.
Grupo Propolco